La prueba se ha realizado en el Salón Aeronáutico de Farnborough (Inglaterra).
Con este método se reduce el tiempo de inspección y se mejoran las condiciones de trabajo.
Las inspecciones visuales de un avión son una parte importante del proceso de producción.
El dron, dotado de una cámara de alta definición, ha efectuado una inspección visual de la parte superior del avión para retratar los posibles desperfectos como rasguños, abolladuras o defectos de pintura. Todas estas imágenes se compilan en un modelo digital 3D, se registran en una base de datos y luego se analizan con el objetivo de mejorar la trazabilidad, la prevención y la reducción de los daños.
El uso de estos vehículos para las inspecciones puede ser muy beneficioso ya que el tiempo de inactividad de un avión para la inspección es reducido. Utilizando un dron, la adquisición de datos tardaría entre 10 y 15 minutos, mientras que usando métodos tradicionales se tardaría unas dos horas. El tiempo no es la única ventaja.
Los operadores ya no necesitarían subirse a un brazo telescópico para realizar las inspecciones visuales, a veces en malas condiciones atmosféricas, y las imágenes se podrían analizar en cualquier momento posterior y en una oficina.
Según la Jefa de Calidad de Airbus, Nathalie Ducombeau, «el uso de esta nueva tecnología ofrece mejores condiciones de trabajo, incluyendo mayor seguridad y comodidad para los inspectores de calidad» (vídeo).
De momento, este nuevo método se está probando en aviones A330 pero Airbus está trabajando para poder implementarlo en otros programas.
Fuente: 20 Minutos