Los datos del radar examinados apuntan a que la nave fue más allá de sus límites en esa elevación.
Los datos del radar examinados por los investigadores parecen mostrar que el vuelo QZ8501 de AirAsia realizó un empinado ascenso «increíble» antes de estrellarse, lo que posiblemente llevó al Airbus A320 más allá de sus límites, según una fuente conocedora de los primeros hallazgos de la investigación.
El dato fue transmitido antes de que el avión desapareciera de las pantallas de los controladores del tráfico aéreo en Yakarta el domingo, ha añadido la fuente, que ha pedido no ser identificada. «Hasta ahora, las cifras tomadas por el radar son increíblemente altas. Este ritmo de ascensión es muy alto, demasiado alto. Parece estar por encima de la capacidad del aparato», ha precisado.
La fuente ha añadido que los datos en los que se basan estas suposiciones son muy incompletos. Los colegas y amigos del capitán indonesio a bordo le han descrito como un piloto experimentado y profesional.
Mal tiempo
Los hallazgos preliminares hacen que se centre aún más la atención en el papel que el mal tiempo y la reacción de la tripulación a las tormentas y nubes en la zona jugaron para que el avión se estrellara en el mar de Java con 162 personas a bordo.
Encontrar las cajas negras del aparato, donde se graban las conversaciones en la cabina y los datos de vuelo, es fundamental para completar los datos del radar ya disponibles. Con las cajas negras «podemos establecer qué pasó en la cabina y qué estaba pasando en el aparato. Podemos concluir si la información del radar es precisa», ha subrayado la fuente.
Permiso de ascensión
A las 6:12 horas del domingo, 36 minutos después de despegar del aeropuerto Juanda de Surabaya con destino a Singapur, el piloto pidió permiso para ascender a 38.000 pies desde los 32.000 y desviarse a la izquierda para evitar el mal tiempo.
Dos minutos después, Yakarta respondió pidiendo al QZ8501 que virara siete millas a la izquierda y ascendiera a 34.000 pies. No hubo ninguna respuesta de la cabina. El aparato todavía era detectado por el radar antes de desaparecer a las 6:18 horas.
Una imagen que presuntamente fue filtrada por AirNav Indonesia, que gestiona el espacio aéreo del país y compartida a través de varias web, aparentemente muestra al QZ8501 a una altitud de 36.300 pies y ascendiendo a una velicidad de 353 nudos. La fuente no ha querido confirmar si esa imagen es precisa.
Dos veteranos pilotos han comentado a Reuters que, de ser precisa, la imagen y la información revelada hasta ahora apuntan a que el aparato podría haber ascendido repentinamente y luego haber perdido velocidad. Esto puede provocar que el aparato se pare en pleno vuelo antes de caer al mar, han aclarado.
Otros aviones más altos
La fuente cercana a la investigación ha dicho que otros aparatos en la zona en el momento del siniestro volaban a mayor altitud. La web de seguimiento de aviones flightradar24.com ha indicado que volaban a entre 34.000 y 39.000 pies.
«Sabemos que había malas condiciones meteorológicas y grandes nubes. Pero (los otros aviones) estaban más alto y no parecieron encontrarse con grandes problemas. También queremos analizar esto», ha indicado la fuente.
Fuentes de la industria han indicado a Reuters de que podría haber paralelismos entre este incidente y el accidente del vuelo AF447 de Air France en 2009. La investigación del accidente de ese Airbus A330 mostró que el copiloto perdió los lectores de velocidad debido a la presencia de hielo en el armazón.
Su reacción de pánico hizo que intentara seguir ascendiendo pese a las repetidas señales de alerta y la tripulación no se dio cuenta de la situación, provocando que en último término el aparato terminara cayendo en aguas del océano Atlántico.
Fuente: La Voz de Galicia
Imágen: commons.wikimedia.org