El Departamento de Defensa de los EEUU ha publicado el pasado mes de abril una oferta para comprar un Airbus A321 al menos precio posible, como es habitual en los contratos públicos. Aunque la fecha tope era el 1 de diciembre de 2020, este contrato ya tiene un adjudicatario, por lo cual se ha hecho público.
El A321 presentado para la oferta tenía que estar completo tanto interior como exteriormente. El avión tiene que conservar todos sus asientos.
¿El objetivo? Hacerlo explotar. Mediante esta prueba el DoD quiere comprobar la integridad estructural del avión, detectar sus puntos débiles y como se comportaría ante una situación semejante, así como los rastros que dejaría y cómo se podría investigar lo sucedido de cara a incrementar la seguridad de este modelo ante una amenaza terrorista.
Aunque no se ha especificado la fecha de llegada del avión a la base aérea, el contrato especificaba que tenía que tener lugar dentro de los 180 días posteriores a la adjudicación del mismo por lo que, probablemente, la prueba tenga lugar el año que viene.
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Articulo: Raúl Viorel M.