A veces a las aeronaves se les da usos distintos a los vuelos comerciales, en este caso la empresa Land Rover para hacer gala de su nuevo modelo de la Range Rover sport ha utilizado un Boeing 747, lo ha vaciado por dentro y lo ha convertido un un parque de recreo dónde el Range Rover Sport demuestra sus capacidades para enfrentar cualquier obstáculo que se le ponga por delante.
Con información de: Motor Pasión