Hallan el avión soviético que efectuó el primer ‘ataque tarán’ de la II Guerra Mundial

En un bosque a unos 20 kilómetros de Moscú se han descubierto los restos de un legendario avión soviético de la Segunda Guerra Mundial. El piloto Víktor Talalíjin efectuó con ese aparato la primera embestida aérea nocturna contra los nazis.

Según contaron los historiadores locales a la cadena Pervy Kanal, el hallazgo lo hizo un lugareño que durante un paseo por el bosque vio en el suelo un enorme cráter en forma de embudo y restos de un avión a su alrededor. El análisis de las partes encontradas permitió identificar el número del aparato y de su motor. Conforme a los archivos del Ministerio de Defensa de Rusia, el avión fue el que pilotaba Víktor Talalíjin cuando, hace 73 años, realizó el primer ‘ataque tarán’ nocturno en la historia de la Segunda Guerra Mundial. El ‘ataque tarán’ consiste en embestir un avión enemigo con el morro de la propia aeronave como si esta fuera un ariete; y es que ‘tarán’ en ruso significa precisamente ‘ariete’.

El episodio tuvo lugar la noche del 6 al 7 de agosto de 1941, un mes y medio después de que empezara la Gran Guerra Patria, nombre con el que se conoce en Rusia el período de la Segunda Guerra Mundial en el que la URSS luchó contra la Alemania nazi. Talalíjin, en su Polikárpov I-16, un caza monoplano con ala en voladizo, estaba patrullando el espacio aéreo de Moscú cuando se cruzó con los aviones de la Luftwaffe. Entonces se desató el combate aéreo, pero el piloto soviético, que en aquel momento tenía 23 años y el grado de subteniente, pronto se quedó sin munición y decidió llevar a cabo una embestida. Desde el inicio de la Gran Guerra Patria las embestidas se convirtieron en una de las tácticas de las tropas aéreas soviéticas, pero hasta entonces no había tenido lugar ningún ‘ataque tarán’ nocturno.

A una altura de 4.500 metros, Talalíjin embistió el bombardero enemigo, a bordo del cual iban cuatro tripulantes, un Heinkel He 111 tres veces mayor que el I-16 soviético. Talalíjin evitó una muerte que parecía segura y, habiendo resultado simplemente herido, saltó de su caza destrozado. Se precipitó 800 metros en caída libre hasta que logró abrir el paracaídas. El 8 de agosto le concedieron la distinción más alta del país, la de Héroe de la Unión Soviética, por haber derribado el bombardero nazi. Dos meses después, el 27 de octubre de 1941, el joven moría en otro combate aéreo en los alrededores de Moscú. Durante los cuatro meses de  guerra en los que combatió logró abatir un total de seis aviones de la Luftwaffe.

Fuente: Actualidad RT