Los drones le han quitado el puesto a la cometa en el kitesurf… y no es el único deporte cambiando para siempre

Si hay un campo donde la tecnología no ha dejado de evolucionar en los últimos años, ese es el del deporte. Ahora disponemos de aplicaciones móviles para entrenar, pulsómetros cada vez más precisos, gadgets que nos ayudan en los entrenamientos de fuerza… Toda una gama de accesorios que podemos utilizar para mejorar nuestro entrenamiento.

La novedad tecnológica por excelencia y que viene pisando fuerte por sus grandes posibilidades de aplicación en el deporte son los drones: estos vehículos aéreos no tripulados, ahora al alcance del gran público se perfilan como buenos compañeros de todo tipo de deportes. Veamos qué posibilidades tienen dentro de nuestra práctica deportiva.

Grabación y retransmisión de todo tipo de deportes

drones

El presente de los drones en el mundo deportivo pasa por utilizar su ayuda para la grabación y retransmisión (en vivo y en diferido) de todo tipo de deportes. Así, los drones con cámaras se están utilizando actualmente en grandes eventos como los partidos de las ligas de fútbol y nos permiten disfrutar desde nuestras casas de diferentes planos, antes casi inimaginables.

Pero la grabación de competiciones y entrenamientos va más allá de la simple retransmisión para el gran público. Desde hace tiempo los entrenadores vienen usando las grabaciones realizadas con teléfonos móviles o con cámaras para poder examinar detenidamente la técnica de sus deportistas, observar posibles errores o carencias y más tarde poder realizar correcciones y mejorar estos puntos débiles.

La grabación con drones va un paso más allá en este sentido ya que hace posible grabar desde distintas posiciones, obtener diferentes puntos de vista o simplemente poder seguir de forma cómoda a los deportistas (pensemos en los velocistas, en los pilotos o en los deportes de agua) para poder ofrecerles un feedback de calidad a posteriori.

Drones integrados dentro de los deportes

Si nos ceñimos a lo que hemos visto hasta ahora, los drones han actuado simplemente como un espectador más dentro de los diferentes deportes, pero ¿sería posible integrarlos dentro de la práctica deportiva? Es una propuesta arriesgada, pero que en determinados ámbitos puede funcionar.

Una de las propuestas para integrar deporte y drones es además made in Spain y viene de la mano del equipo de Retto: especialistas en ciclismo, se preguntan qué ocurriría si se incluyera, en un deporte tan tradicional como es el de la bicicleta, el uso de drones para realizar diferentes funciones. ¿Podrían llegar a desplazar al componente humano en algunas funciones, como por ejemplo la del aguador?

Otra forma de integrar los drones en el deporte la encontramos en el dronesurfing, una modalidad dentro del kite-surfing en la que el drone le quita el puesto a la tradicional cometa. Los chicos del equipo de FreeFly Systems, armados con una tabla de skimboard le han dado este original uso a un drone con el que, además, consiguen alucinantes imágenes.

En el futuro: carreras de drones y seguimiento personal

El futuro ya está aquí, y es que este año los drones han creado su propio deporte, las carreras de drones, con su propia liga: la Drone Racing League, que ha sido retransmitida por importantes cadenas deportivas como la ESPN. Su primer gran evento en el estadio de los Miami Dolphins fue una frenética carrera a lo largo de todo el estadio (parking y pasillos incluidos) que podéis vivir en primera persona con el vídeo que se encuentra sobre el texto.

Aunque se trata todavía de un deporte minoritario, el próximo año han anunciado ya fechas para llevar la competición a otros países como Reino Unido. Si siguen la estela de los e-sports, las carreras de drones pueden convertirse en poco tiempo en grandes eventos como lo son hoy la Fórmula 1 o el motociclismo.

Siempre que hablamos de drones nos referimos a aeronaves controladas en remoto por un piloto, pero otra de las grandes posibilidades es la de crear drones autónomos que pudieran seguir automáticamente un objetivo, sin necesidad de un piloto. En esa línea se está desarrollando el drone Lily: un drone con cámara integrada que te sigue allá donde vayas gracias a un pequeño dispositivo de seguimiento que actúa como una baliza.

Este drone está pensado especialmente para la grabación de deporte, es resistente al agua y puede alcanzar hasta los 40 kilómetros/hora al desplazarse. A través de su función de seguimiento, el drone nos va siguiendo allá donde vayamos sin necesidad de que otra persona lo pilote y siempre a una distancia no mayor de 100 pies (unos 30,5 metros). Un accesorio interesante sobre todo para deportes extremos.

Fuente: Vitonica